Insólita expulsión
En los primeros años del fútbol, en Inglaterra, los partidos carecían de árbitros. Fiel a sus orígenes como deporte de caballeros, los capitanes de los dos equipos solventaban cualquier disputa que se pudiera originar. Pero, a medida que crecía la importancia de lo que estaba en juego, también aumentaba la cantidad de quejas.
Por lo que se resolvió que cada equipo nombrara un juez que pudiera recibir los reclamos de sus jugadores. Y se nombraba un árbitro neutral que se colocaba en la línea de banda, cronometraba el tiempo y sólo se lo consultaba si los jueces no podían llegar a un acuerdo sobre alguna sanción o incidencia del partido.
Recién a partir de 1891 con la sanción de las “Reglas del Juego”, en Gran Bretaña, el árbitro pasó a ser una figura permanente en el campo de juego: una sola persona con el poder de expulsar jugadores y sancionar las faltas de manera inapelable. Los dos jueces se convirtieron en “jueces de línea”, “linesmans” o “árbitros asistentes”, como se los conoce hoy.
Sin embargo en Salto y, seguramente, también en toda la Argentina, los jueces de línea continuaron perteneciendo a cada uno de los equipos que disputaban el partido, hasta bien entrado el Siglo XX. En varios diarios y revistas de Salto de las década de 1.920 y 1930, luego de la formación de cada equipo se consigna el nombre del “linesman”, como por ejemplo, en el partido de Sports Salto, contra Sports de Pergamino del año 1922 (Ver “Gol Olímpico” en el Tomo I), el “linesman” del equipo de Salto es Ambrosio Ponce y el de Pergamino es D.De Crisci.
Pero es en la Revista “Salto” (*) del viernes 21 de julio de 1939 en donde aparece una nota sobre el partido jugado en Carmen de Areco entre “Sportsman” de esa ciudad y el club “Santa Inés” de las “4 Puertas” que incluye la increíble noticia que da origen al título de este relato:
Santa Inés perdió contra Sportsman “En Carmen de Areco, jugó Santa Inés contra Sportsman el domingo último, por el campeonato. El resultado favoreció a Sporstman que se adjudicó el triunfo por la mínima diferencia, después de un encuentro en el que la técnica brilló por su ausencia, y que se caracterizó por la violencia y brusquedad de las acciones.
Los locales conquistaron el único tanto de la tarde a los cuarenta y cinco minutos del primer tiempo, por intermedio de Cadevarte, tanto que a la vez de la victoria, les da derecho a la posesión de la copa que había instituido la Comisión de Festejos, con motivo de celebrarse ese día las fiestas patronales.
Arbitró el encuentro el referée Arturo Vincelli, haciéndolo con la corrección que lo caracteriza. El público y los jugadores, correctos. Sólo hubo que lamentar la expulsión, a los 15 minutos, del linesman Roberto Lombardi, por haber insultado al árbitro, actitud que le costará su buena suspensión de acuerdo al reglamento de la Liga.”
Los equipos:
Los teams se presentaron integrados por los siguientes jugadores.
Sportsman: Lima; Moratelli y Sahanan; Acuña, Etchart y Flores; Casco, Monsalvo, Leanza, Cadevarte y Depiche.
Santa Inés: Biocca; Russo y L. Caramánico; Cuello, A. Crespo y J.Caramánico; C. Crespo, Andrade, Díaz, Oyarzabal y B. Crespo.
En otra página de la misma revista, bajo el título “Se reunió la Liga”, se informa:
El martes, como de costumbre, se reunió la Liga Deportiva dándose resolución a varios asuntos, designándose los referées y linesmans que deberán actuar el domingo.
Se trató también la suspensión del linesman Lombardi, que insultara al referée durante el partido que, en Carmen de Areco, disputaron Sportsman y Santa Inés. Se le pena con treinta días de suspensión.”
Una vez más, no nos dejan de sorprender los distintos hechos producidos a través del tiempo en el fútbol de Salto que confirman su rica historia.
(*) Revista “Salto” – Año 1 – Nº 3 – “Publicación Absolutamente Imparcial”
Director: Marcelo Ochando – Administrador: Gerónimo F. Tuttolomondo
Impresión: Nueva Imprenta “Porteña” - Dirección y Administración: Buenos Aires 692 - Salto